Análisis de la sociedad en “Fahrenheit 451”

  En la novela Fahrenheit 451 del autor norteamericano Ray Bradbury se presenta una sociedad que vive pero no tiene vida, sin identidad y está fuertemente influenciada por los medios de comunicación y la tecnología. En esta no hay cultura, ya que no hay memoria ni historia, nadie se preocupa por saber ni preguntar. esta sociedad se basa en no preguntar “por qué” y solo se les responde el “qué”. Gracias a esto, los medios pueden decir cosas incoherentes, ya que ellos solo repetirán y no pensarán.

       En primer lugar, con respecto a la educación , está orientada a que los estudiantes no piensen, que no se cuestionen absolutamente  nada, y , por lo tanto, las actividades más importantes que se realizan en la escuela son proyección de imágenes y películas y deportes. Clarisse le dice a Montag las razones por las cuales no quiere ir al colegio:
 "No considero que sea sociable reunir a un grupo de gente y, después, no dejar que hable. Una hora de clase de TV, una hora de baloncesto, de pelota base o de carreras, [...]. Pero ha de saber que nunca hacemos preguntas o, por lo menos, la mayoría no las hace; no hacen más que lanzarte la respuesta"
  Luego, con respecto a la cultura, en esta sociedad no hay historia ni recuerdos, nadie se interesa por lo sucedido. Algo muy importante es que los libros están prohibidos, y en el caso de haber algunos, eran quemados. Esto era así ya que hacían pensar, adquirir nuevas ideas, y cuestionar la información. Y no querían esto, querían  que simplemente la gente repitiera todo sin siquiera entenderlo o pensarlo.

   Con respecto al arte, lo había pero se trataba de uno abstracto para que no puedan pensar mas de lo que ven:
  "¿Has estado en los museos? todo es abstracto .Mi tío dice que antes era distinto.Hace mucho tiempo los cuadros decían cosas y hasta representaban gente"
  Sobre los medios de comunicación, estos  dan información de tal forma que no hay tiempo para procesarla. En la actualidad de alguna forma sucede lo mismo, ya que con Internet, la televisión , los diarios, y otros medios, dan mucha información y sino se escucha otra opinión sobre esta, se puede caer en la creencia de que solo existe una realidad. Una diferencia es que solo se conocía un punto de vista y, a diferencia de la actualidad, el que opinaba distinto era reprimido. Además ahora  existe más de una opinión, y así se puede comparar:
  “Tranquilidad  Montag, dale concursos para que puedan ganar recordando la letra de las canciones más populares, o los nombres de las capitales de Estado, o cuánto maíz produjo Iowa, atibórralos de datos no combustibles, lánzales encima tantos hechos que se sientan abrumados” 
  Además en una parte del libro, Montag está en el subterráneo e intenta leer la Biblia, pero no lo dejan concentrarse.
  En conclusión, lo que principalmente quería esta sociedad era que no se avance mas que tecnológicamente, que nadie piense ni innove con nuevas ideas, que solo se viviera el presente, sin proyectar ningún futuro, solo "divertirse" sin importar absolutamente nada. Que no se creciera intelectualmente. La felicidad se basa en el ocio, la diversión, y la no preocupación.

El sol de todos los días

El sol de todos los días

Despertar todos los días, a la misma hora siempre, antes de que saliera el sol de todos los días. Esa era mi rutina, ponerme las pantuflas, tomar un café, vestirme y calzarme, subirme a mi auto e irme a trabajar.

Ese día hice todo lo que acostumbraba a hacer por las mañanas, pero algo se sentía diferente, como que no sería un día normal. De camino al trabajo la ruta estaba cortada, para mi desgracia justo ese día tenía una charla con mi jefe sobre un aumento, me decidí a no esperar que se solucionaran los problemas, así que tomé un camino alternativo, era un camino sin pavimentar y estaba rodeado por un bosque.

A mitad de camino, a mi auto se le acabó la gasolina, me ví obligado a bajar y caminar hasta encontrar una estación de servicio. Qué curiosa es la vida, porque si un chico en bicicleta no hubiera chocado contra el cartel de indicaciones, habría llegado a la estación de servicio, pero en cambio comencé a adentrarme cada vez mas en el bosque, a tal punto que ni siquiera recordaba dónde estaba mi auto.

 Pasaron horas y horas, y yo seguía perdido. El sol ya se había ocultado, las sombras me empezaron a cubrir, las ramas de los árboles comenzaban a parecer garras que querían tomarme y aplastarme. Comencé a escuchar voces provenientes de los arbustos, al principio solo murmullos, así que pensé que era mi imaginación, pero estaba equivocado. Cada vez las voces eran más fuertes, a cada segundo que transcurría me ponía más y más nervioso. Finalmente, no lo soporté y salí corriendo.

Sentía las pisadas de varias personas y como se me acercaban, miré hacia atrás para ver si lograba identificar, cuando me di vuelta alguien saltó de los arbustos hacia mí y me golpeó, quedé inconciente. Cuando me desperté me estaban arrastrando hacia dentro de una cueva y lo último que pude ver fue cómo salía el sol, el sol de todos los días.

                                                                                                     Azul Martina Fontana

La crónica periodestica

15 de abril de 2017

Cayó y rompió el balcón, un frustrado Romeo quilmeño.

LAMENTABLE SUCESO, UN BALCÓN, UN CORAZÓN Y ALGUNOS HUESOS ROTOS.

   Horacio Pérez de 62 años, conocido almacenero de Quilmes Oeste, querido por sus vecinos, admirado por sus colegas, protagonizo en el día de ayer, martes 28 de marzo, un lamentable episodio, que lo dejó invalido, con el corazón roto y una causa por daños y acoso.

  Alrededor de las 22:00 hs. del pasado martes había cerrado su negocio como todos los días y se dispuso a confesarle su amor a Alicia, una vecina y clienta de la zona. Junto a un grupo de mariachis dio una serenata, donde sonaron “Las mañanitas”, “Allá en el rancho grande”, “cucurucucu Paloma”, entre otros. Cuentan los vecinos del lugar que nunca se escucho ni se vio en el barrio tal despliegue mexicano. Nadie sabía de su apasionada idea, ni de su amor por Alicia, una mujer de unos 64 años muy reservada. “Ella solo sale para ir al almacén”-dijo Dolores, vecina y clienta-.

  Sonaba “Cielito lindo”, Alicia no se asomaba, ni corría las cortinas, no daba ninguna señal de curiosidad por el alboroto del exterior.

   Horacio, impaciente, trepó al balcón, decidido a que su Julieta escuchara lo que tenía para declarar, con su esmoquin azul como los ojos de su amada, y una flor en el ojal. Cuando escuchó que la puerta se abría, sus latidos se aceleraron como sus pasos, que causaron que se resbalara. su mano lo seguía sujetando y logró sostenerse de la reja. Finalmente, Alicia se asomó, con ruleros y un camisón carmesí, sin la dentadura, con la mirada desorbitada. Él alcanzó a verla y gritó “Cielito lindo, los corazones”. Al verlo, ella le lanzó una pantufla; enloquecida, comenzó a decirle una serie de improperios “Esto no va a quedar así” sentenció, “te voy a denunciar”, “se te van a ir las ganas de vender galletitas, asqueroso”, “¡Y callen a esos mexicanos narcotraficantes!”

    Algo tronó desde la loza y pedazos de cielo raso comenzaron a caer. “él balcón se desmorona. ¡Sálvese quien pueda!” dijeron los mariachis a coro. El frustrado Romeo cayó junto con el escenario de su romántica demostración de afecto.

(El dolor del corazón fue menor al de la caída)

  Intervino la DDI de Quilmes, el CREM y los bomberos.

 Lo trasladaron al hospital Gral. De agudos Dr. Isidoro Iriarte, de Quilmes.

   La DDI acudió tras la acusación exagerada de Alicia sobre el uso y venta de estupefacientes, conectado con narcotraficantes mexicanos.  Fuentes oficiales aseguraron fue no encontrar con drogas en el almacenero ni en su almacén.

   Recayó sobre él la denuncia de acoso y daños materiales que realizo Alicia en la comisaría 3ª de esta ciudad.                                  

   Horacio continúa internado con diagnóstico reservado. Sus vecinos, indignados con Alicia, colocaron un parlante con música mexicana frente a su casa.               

                     

                                                                                                                        

*Dialogos*Descriptivo*Comparación*Metáforas

                                                                                      Azul Martina Fontana